viernes, 4 de noviembre de 2011

Resumen Primer tomo, sección tercera, Capitulo 8 ( III parte)

3.  Ramas industriales inglesas sin límite legal de explotación

Hasta aquí, hemos observado el instinto de prolongación de la jornada, el hambre insaciable de trabajo excedente, en un terreno en que los abusos desmedidos, no sobre- pujados, como dice un economista burgués de Inglaterra, por las crueldades de los españoles contra los indios en América, obligaron por fin a atar el capital a las cadenas de la ley.
Volvamos ahora la vista a algunas ramas de la producción en que el estrujamiento de la fuerza de trabajo del obrero se halla aún, o se hallaba hasta hace poco, libre de toda traba.
“ Presidiendo una asamblea, celebrada en el salón municipal de fiestas de Nottingham, el 14 de enero de 1860, Mr. Broughton, un County Magistrate, declaró que en el sector de la población urbana que vivía de la fabricación de encajes reinaba un grado de tortura miseria y desconocido en el resto del mundo civilizado...A las 2, a las 3, a las 4 de la mañana, se sacan a la fuerza de sus sucias camas a niños de 9 a 10 años, y se les obliga a trabajar para ganarse un mísero sustento hasta las 10, las 11 y las 12 de la noche, mientras su musculatura desaparece, su figura se va haciendo más y más raquítica, los rasgos de su cara se embotan y todo su ser adquiere un pétreo torpor, que con sólo contemplarlo hace temblar”.(pag.188)
La cerámica ( potterie ) de Staffordshire ha sido objeto de tres encuestas parlamentarias en el transcurso de los últimos 22 años.
Para nuestro objeto, bastará con tomar de los informes de 1860 y 1863 unas cuantas declaraciones testificales  de los propios niños explotados.
Guillermo Wood, de 9 años, “ tenía 7 años y 10 meses cuando comencé a trabajar”. Se le dedicó desde el primer momento a “run moulds” ( es decir, a transportar al secadero las piezas acabadas y devolver al taller las formas vacías ). Entra todos los días, menos los domingos, a las 6 de la mañana y abandona el trabajo a las 9 de la noche aproximadamente. Resultado: ¡ 15 horas de trabajo diario para un niño de siete años !
J.Murray, de doce años declara: “ I run moulds and turn jigger ” ( darle a la rueda ) “Entro hacia las 6, y a veces hacia las 4 de la mañana. Ayer trabajé toda la noche, hasta las 8 de la mañana de hoy. No me metí a la cama desde la noche anterior. Conmigo, trabajaron toda la noche 8 ó 9 chicos más. Todos, menos uno, han vuelto a entrar al trabajo hoy por la mañana. A mí me pagan 3 chelines y 6 peniques a la semana. Cuando me quedo trabajando toda la noche, no cobro más. Durante estas últimas semanas, he trabajado dos noches enteras.”(pag.189)
La manufactura de cerillas data de 1833, en que se inventó la aplicación del fósforo a la cerilla. A partir de 1845, esta industria comienza a propagarse rápidamente por Inglaterra, difundiéndose por los sectores más densos de población de Londres y por Manchester, Birmingham, Liverpool, Bristol, Norwich, Newcastle, Glasgow, etc., y con ella el trismo, enfermedad que un médico vienés descubre ya en 1845 como característica de los cerilleros. La mitad de los obreros de esta industria son niños menores de 13 años y jóvenes de menos de 18.(pag.191)

No hay comentarios:

Publicar un comentario